Vaya temporal que hace por aquí!!
Estamos en pleno invierno, pero buena falta hacía la lluvia, nos estábamos quedando secos.
Y con este frío lo que más apetece es un plato de cuchara como por ejemplo estos garbanzos con acelgas.
Las acelgas contienen cantidades muy elevadas de vitamina A; es una de las verduras más ricas en vitamina A.
Aporta vitaminas del complejo B, como B1, B3, B5, B6, B9, que resultan esenciales para las funciones metabólicas de nuestras células.
Son una excelente fuente de vitaminas antioxidantes, como la vitamina C y contiene pequeñas cantidades de vitamina E.
Es una de las verduras con más vitamina K, para que os hagáis una idea, 100g aportan el 700% de la cantidad diaria.
Es una fuente rica en minerales como el cobre, calcio, sodio, potasio, hierro, manganeso, fósforo, magnesio y potasio y más contenido de hierro que las espinacas.
Rica en fibra soluble, que ayuda a mantener el tránsito intestinal.
Fuente rica de ácidos grasos Omega-3 y tiene poquísimas calorías, 19 por cada 100 g.
En cuanto a los garbanzos contienen gran cantidad de proteína por eso son ideales para las dietas vegetarianas y veganas.
Tienen hidratos de carbono de absorción lenta, son ideales tanto para aquellas personas diabéticas, como para las que necesitan energía extra a largo plazo.
Poseen a su vez vitaminas y minerales, entre los que destacan el calcio, magnesio, hierro, fósforo y potasio, que ayudan a mantener las defensas altas de nuestro cuerpo.
Veis que de propiedades buenas?
Entre tanto ingrediente bueno tiene que salir una rica receta.
Es perfecta para los niños también, por las proteínas que les va a aportar y todas las vitaminas.
Le incorporamos un poco de chorizo y jamón porque así el pequeño los come mejor.
Vamos allá con la receta...